Hoy, cuando en Varsovia son las 16:56 y yo estoy sentada en mi oficina a punto de irme a dar una clase de inglés, en Barquisimeto son las las 10:56 y Luis (mi novio) ya debe tener en sus manos un diploma que dice que ahora es Ingeniero Electrónico de la República Bolivariana de Venezuela (República de Venezuela en mi corazón). Arriba está con su mami (Señora Paula) en la práctica del acto hace pocos dias. Su papá le entregaba el diploma y su mamá la medalla. Que orgullo, no? :) Tienen con qué!
Este es un momento que quisiera haber podido compartir con él, pero que por leyes de la vida no pude. Muchas veces hay que sacrificar una cosa por otra. Pero no es momento de llanto señores! El caballero (ahora también ingeniero), estará por aquí la próxima semana para unirse a la colonia de AIESECos venezolanos que estamos invadiendo Europa, pasará por las frías tierras de Polonia para luego subir a vivir los próximos meses de su vida en las aún más frías tierras de Estonia.
Así que novio! Felicidades por este gran logro! Un besote desde aquí! Te ganaste ese diploma como Dios manda! (yo también me gané el mío pero no lo recibiré así con mi toguita y todo porque preferí venirme a echar cuento con los polacos sobre el calentamiento global y los idiomas eslavos, justo cuando me tocaba).
Les dejo abajo una fotico coqueta de cuando nos despedimos en el Aeropuerto Internacional Simón Bolívar cuando yo me disponía a saltar el charco calculando caer en Varsovia (y le atiné!).
P. D. En los últimos días me doy cuenta de lo extraño que somos los seres humanos: sacrificamos familia, amigos y pareja por alcanzar lo que queremos. Pero, con el corazón apretado en una mano, sigo mi camino porque es el que quiero seguir. Tal vez algún día regrese a mi patria con los míos a hacer un cambio por mi Venezuela (si, es cierto...no tengo ganas de volver, veamos qué pienso en unos meses...apenas llevo uno). Mientras tanto me quedo un largo rato como Citizen of the World...
peace out!