Coni, al igual que su hermano, recibe el nombre gracias a la originalidad de sus padres (luis y yo) que lo toman de su nombre científico Coniferus quiensabeque. Todos (Luis, Kasia y yo) colaboramos en abrirle el hueco (a la tierra..ya saben, para sembrarlo...a Coni!) pero este no tomó tanto trabajo como el de Ficu que hasta piedras hubo que sacar de la tierra donde crecería. Luego de unos 3 minutos (1 cada uno) la casita estuvo lista y a sembrar!
Por supuesto no podía faltar el merecido bautizo. Esta vez con todo y madrina! En Diciembre lo veremos tal vez bañadito en nieve y un poquito más grandecito ;)